5 actividades que enseñan a los niños cómo ahorrar energía

Introducción

¿Te preguntas cómo enseñar a los niños a ahorrar energía de forma educativa? Participar en actividades que fomenten el ahorro de energía no sólo puede resultar divertido sino que también les ayuda a desarrollar un sentido de responsabilidad ambiental asegurando un futuro sostenible para todos así como para las generaciones venideras.

Encuentra aquí 5 prácticas actividades para niños que les ayudarán a comprender la importancia del ahorro energético en un mundo globalizado. ¿Por qué resulta tan relevante educar a los niños sobre este tema? El malgasto de energía, más allá de mayores facturas, contribuye al cambio climático y agota nuestros recursos naturales. Si no tomamos medidas, podríamos enfrentarnos a un futuro con graves problemas ambientales.

Fomenta así prácticas de ahorro de energía, tanto en el hogar como en la comunidad, y marca la diferencia para un mundo más verde.

5 juegos para enseñar a los niños cómo ahorrar energía

Enseñar a los niños a ahorrar energía es esencial para promover un estilo de vida sostenible y consciente. Aquí te presentamos 5 juegos o actividades divertidas para enseñarles la importancia de una mayor eficiencia energética:

1. La ‘gincana’ de la energía

Este juego se realiza normalmente en pareja. Cada una de las parejas recibe una lista de tareas que deben completar en un tiempo determinado. Son tareas diseñadas para fomentar el ahorro de energía: usar botellas de agua reutilizables, jugar con juguetes que no requieran pilas, desenchufar aparatos que no se estén utilizando o apagar las luces en habitaciones donde no se estén usando.

2. El juego de la memoria energética

Imprime tarjetas con imágenes relacionadas con el ahorro de energía o frases que hablen sobre el tema. Cada tarjeta tiene una pareja, y los niños deben emparejarlas. Puedes utilizar en el juego los siguientes ejemplos:

- Si el grifo en casa está abierto sin que alguien lo esté usando, debo… CERRARLO PARA NO DESPERDICIAR EL AGUA

- El calor del horno que encendí hace algunos minutos puedo usarlo para… COCINAR CUALQUIER OTRO ALIMENTO.

- Es mejor darse una ducha que… PREPARARSE UNA BAÑERA

- Para ahorrar energía, es más recomendable la compra de pilas recargables que… UTILIZAR BATERÍAS DESECHABLES.

- La mejor forma de ahorrar energía es… USAR LUZ NATURAL.

- Para nosotros, es más importante lavar la vajilla de manera… MANUAL, EN LUGAR DE UTILIZAR EL LAVAVAJILLAS.

- En vez de encender el microondas para calentar los alimentos… PUEDO ENCENDER LA ESTUFA PARA HACERLO.

Imprime todas las tarjetas disponibles para el juego y colócalas sobre una mesa. Todas deben ser del mismo color al colocarlas boca abajo. Los más pequeños podrán así jugar el juego de memoria convencional.

3. De oca en oca… A ahorrar energía te toca

Este juego se basa en el popular juego de la oca. Prepara un tablero casero que incluya casillas que fomenten el ahorro de energía. Las casillas de gastos innecesarios te harán retroceder, mientras que las de ahorro de energía te permitirán avanzar. Al jugar, los niños aprenden sobre cómo tomar decisiones que ahorran energía.

4. La temperatura de mi hogar

Es un juego sencillo si sigues la dinámica. Coloca un termómetro en un lugar visible y registra cada 4 horas la temperatura ambiental en una ficha. Para que participen todos, las anotaciones se realizarán por turnos. Se puede jugar en parejas o en grupos, aunque también puede hacerse de forma individual. Los niños deben apagar aparatos eléctricos cuando se ha alcanzado la temperatura deseada.

5. Los guardianes de las luces

Este juego es ideal para niños de 4 a 7 años y fomenta el hábito de apagar las luces cuando no se necesitan. Si hay varios niños en casa, pueden turnarse como 'guardianes' para asegurarse de que las luces estén apagadas en las habitaciones vacías. Si sólo hay un niño en casa, puede hacer turnos con un adulto. También pueden llevar un recuento de cuántas veces encontraron luces encendidas innecesariamente.

Importancia de enseñar a los niños a ahorrar energía

La enseñanza de buenas prácticas en el uso de energía a los niños resulta crucial por las siguientes razones:

1. Educas ciudadanos conscientes 

Comenzar desde temprana edad a hablarles sobre la importancia de apagar las luces, cerrar puertas y ventanas para evitar las corrientes de aire o usar aparatos eléctricos de manera responsable inculca un comportamiento consciente que los niños llevarán consigo en el futuro.

2. Creas conciencia ambiental

Enseñarles sobre el vínculo entre el consumo de energía eficiente y su impacto en el medio ambiente fomenta una profunda conciencia ambiental. Los niños que comprenden tal relación tomarán decisiones más responsables cuando sean adultos.

3. Ahorras recursos naturales

Ahorrar energía tiene un impacto positivo en la economía y la sociedad. Al reducir el consumo de energía, se ahorran recursos naturales y se disminuye la posibilidad de dañar el medio ambiente, lo que beneficia a las familias y a las comunidades.

4. Tiene un efecto mundial

Aunque el ahorro de energía en un hogar pueda parecer pequeño, cuando millones de personas adoptan estas prácticas como hábitos, el impacto en el medio ambiente es significativo. Enseñar a los niños sobre su importancia los convierte en agentes de cambio en sus comunidades.