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07 de febrero | 2023
Empiezas a sentir señales de cansancio, aburrimiento, maltrato o estrés en tu trabajo, pero tampoco tienes un 'plan B' ni sabes si sólo es una situación temporal o pasajera. Quizás estés en esa alternativa: dejar tu empleo actual y buscar algo que te haga más feliz (algunos lo llaman ahora renuncia estratégica) o bien ser más realista e intentar sacar lo mejor de tu actividad laboral.
Hay que recordar que, al final, siempre haremos bien lo que más nos gusta hacer y, por tanto, seremos más productivos con ello. Si te sientes identificado con lo que te estoy hablando, casi seguro que te merecerá la pena continuar leyendo este artículo. Aquí encontrarás 5 signos que pueden significar un claro aviso: debes dejar tu trabajo inmediatamente.
No sólo eso, encuentra también en el post 10 señales de que, a pesar de las dudas, estás en el trabajo correcto. Sopesa ventajas e inconvenientes y decide un futuro laboral que te haga realmente feliz.
Muchas personas están renunciando a sus puestos de trabajo porque no son felices con lo que hacen, o porque sus jefes resultan ser tan desagradables como incompetentes, o porque sencillamente la empresa no les valora como quisieran. La mayoría de las veces se toma la decisión sin tener a mano un “plan b”. En apariencia, esto puede resultar aterrador pero a la larga y con mucho enfoque puede ser positivo.
El diario estadounidense The New York Times lo ha denominado renuncia estratégica. Se trata de un enfoque al que muchos se están adhiriendo y que permite disponer de mayor tiempo, energía y dinero para ejecutar tareas que sí son de agrado de cada uno.
Tomar esta decisión puede resultar bastante complicado sobre todo cuando has trabajado varios años ininterrumpidos en una compañía. Puedes pensar que pierdes un tiempo valioso si renuncias, aun cuando sientas la necesidad de salir corriendo, abrumado y estresado.
El mismo artículo revela que a pesar de ese pensamiento, quedarse estancado frente al mismo escritorio que te ha hecho infeliz puede ser aún más costoso y perturbador. Si continúas gastando largas horas y esfuerzos en algo que sencillamente no cubre tus expectativas, estarás perdiendo una oportunidad valiosísima de hacer cosas que te gustan y que te harán más productivo.
¿Te sientes aburrido desempeñando algunas funciones dentro de una compañía? ¿Quieres llorar cada vez que te despiertas por las mañanas y caes en cuenta que debes ir a trabajar? ¿Te estresa cada vez que entras a la oficina y ves a tu jefe? Pues estas son algunos de los signos que indican que debes salir corriendo sin mirar atrás. Aquí explicamos las 5 señales más importantes.
1. Eres infravalorado
LinkedIn, la red social para profesionales, considera que si un trabajador está infravalorado y no se le reconoce su buen desempeño, la empresa y los gerentes están cometiendo un gran error.
Un empleado necesita que se reconozca lo que hace y que se le premie, preferiblemente con un mejor salario. Cuando no ocurre por mucho empeño que le ponga al día a día, entonces no tiene caso seguir prestando sus servicios.
2. La compañía incentiva el “burtout”
Burtout o síndrome del trabajador quemado se refleja en ese estado de agotamiento físico y mental que experimenta un empleado durante el cumplimiento de sus funciones. Es más grave de lo que se piensa, pues es capaz de alterar significativamente su comportamiento.
Muchas compañías aprecian (consciente o inconscientemente) este tipo de prácticas, haciendo que el personal trabaje más de la cuenta sin ningún tipo de recompensa. Por lo mismo, se sentirá más estresado y abrumado, así que escapar será la mejor alternativa.
3. ¿Te sientes estancado?
Uno de los medios de comunicación de mayor trayectoria como lo ha sido CNN en Español cree que el hecho de sentirse estancado y no poder avanzar dentro de la estructura de la compañía, puede hacer sentir fatal al empleado, sobre todo si se esfuerza todos los días para destacar.
Para ser más específicos, el estancamiento se verá reflejado en las pocas oportunidades de ascenso, en aumentos salariales improbables y en promesas incumplidas de tu jefe.
4. Diferencias constantes con tu jefe
Es normal que tanto tú como tu jefe tengáis algunas diferencias por cuestiones de trabajo. Pero cuando el conflicto va más allá de lo laboral, las peleas se vuelven constantes y sientes poco apoyo de su parte, difícilmente serás más productivo y valorado.
La falta de confianza, además del hecho de sentirte constantemente bajo la lupa de tu superior, es una señal inequívoca de que debes abandonar el barco y buscar mejores oportunidades.
5. Tus funciones te causan estrés
Sabes que tu empleo es tóxico y te hace daño cuando comienzas a generar estrés. Pero además, cuando causa insomnio, te abruma y genera dolores de cabeza, músculos y estómago.
No es todo, pues tu relación con el trabajo es tormentosa cuando te sientes aburrido con lo que haces o cuando sencillamente despiertas y te sientes terrible porque debes llegar a la oficina.
Debes evaluar si realmente lo que haces merece la pena tanta tensión. Si después de tu examen te das cuenta que no es así, entonces coloca tu carta de renuncia sobre la mesa de recursos humanos.
Caso contrario a lo anterior, debes descubrir las 10 señales que indicarán que estás haciendo lo correcto y que debes permanecer en dicha empresa. La revista Forbes las detalla con precisión y las identifica de la siguiente manera.
- La relación con tu jefe inmediato mejora cada día, pero además sientes que es una persona en la que puedes apoyarte en cada proyecto. Si respetas a tu jefe igual que a un padre y sientes que es recíproco contigo, entonces es una clara señal de que hay un buen ambiente de trabajo.
- Confías plenamente en el trabajo de tus compañeros. Pero también crees que junto a ellos el nivel de productividad se incrementará de manera considerable.
- Tu sueldo es bastante bueno y te genera satisfacción. Si crees que tu remuneración y la de tus compañeros están acorde al cargo y al trabajo, entonces es una excelente señal.
- Puede ocurrir que tu trabajo te motiva a niveles extremos. Además, la empresa impulsa la capacitación constante que te permite explorar tus capacidades y explotar tus conocimientos en beneficio de todos.
- Estás en el trabajo adecuado cuando se crean los espacios para hablar de los problemas que afectan tanto al trabajador como a la empresa. Y si tu opinión no queda en segundo plano es porque realmente eres importante para la organización.
- Se toman en cuenta elementos como trabajo en equipo, horarios de trabajo y la productividad.
- Te permiten un comportamiento que refleje tu propia personalidad (sin ser irrespetuoso).
- Tus valores se asemejan a los de la empresa, por lo crees que encajas perfectamente con el sistema de organización.
- Estás ante un equipo que te brinda confianza y seguridad pero que también ofrece un ambiente de trabajo sano y tranquilo.
- Tanto compañeros como superiores valoran tu opinión y tu percepción, aunque haya retroalimentación en torno a ello.
